Saturday, April 26, 2008

La chica se levantó de un sobresalto. Había dormido más de 8 horas, y sin embargo se sentía cansada. ¿Cansada de qué? De estudiar, de trabajar, de vivir quizá.
Tenía un presentimiento de que algo no marchaba bien, a pesar de las promesas de múltiples personas que aseguraban que no había problema alguno. "Hoy no me va a pasar". Se levantó de la cama, sin saber porqué ni para qué, pero con la profunda convicción de que ese día sería diferente. Por vez primera en muchas semanas, este sería un buen día y nada podría salir mal.
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No importó nada. Ni la lluvia, ni el cansancio, ni el dolor de garganta (que comenzaba a sospechar que era más una creación de la propia mente que un efecto del cambio climático). Y así, sin más, se decidió a dibujar casi a fuerza una sonrisa en su rostro. "Hoy no me va a pasar", pensaba. Y es que hoy, justamente hoy, nada podía ponerla triste. Hoy era el primer día del resto de su vida... hoy las cosas iban a cambiar, y para siempre marcharían bien por la sencilla razón de que todo tenía para triunfar; para sentirse segura, sentirse feliz, saber que todo fluye y que las cosas encontrarían su lugar nuevamente... y si no tampoco importaba.
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Es lindo tener ilusiones.
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No comprendía nada. ¿Por qué había pasado otra vez? No había ninguna razón. Pero así era desde hacía varios meses. Nada tenía que pasar, pero pasaba. Seguía pasando, irremediablemente. Seguramente algo en su interior estaba pudriéndose. Seguro sería culpa de ella misma, incapaz de reconocer las bondades del mundo. Y claro, como siempre, se echaba la culpa. Quizá no era sólo ella. A lo mejor ni siquiera importaba. ¿Qué sentido tenía el mundo?, ¿qupe sentido su vida?, y ¿qué sentido sus lágrimas? Nada. No quedaba nada. Quién sabe qué fuerza extraña la obligaba a seguir luchando (¿luchando porqué y para qué?), a seguir levantándose de la cama, seguir pretendiendo que las cosas podían ponerse mejor y que una sonrisa todo lo arregla. Vaya que se estaba quebrando. ¿Cuánto tiempo más?
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"Hoy no me va a pasar. Y si me pasa, ¿a quién le importa? Ni siquiera a mi." Mañana será otro día...
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"Hoy no me va a pasar"

1 comment:

ciclo365dias said...

Esta frase tuya, "Seguramente algo en su interior estaba pudriéndose" me recordó a algo que dice Guido Ceronetti sobre lo putrefacto y los malos olores. Cuenta él cómo son estas fragancias algunos indicios de la presencia del alma. Felizmente la expresión que escribes es llana, pero interesante porque esa parte del alma en el interior por medio de lo putrefacto se propaga del modo más espiritual o incluso místico. Saludos