El rincón de una calaca*

Siempre lo he sabido, pero en los días pasados me he dado más cuenta que nunca de que siempre estás en mis pensamientos...

Tú, ese chico raro y por momentos inalcanzable
tú y tu risa, tu inteligencia, tu personalidad
entre burlona y melancólica,
entre reflexiva y luminosa..
siempre tú.

Esa voz que comenzó a resonar en mi mente durante las primeras pláticas,
tu irresistible forma de pensar, de sentir y de comprender.
Tú que sin darte cuenta estuviste siempre ahí...

Tú y tus ojos brillantes, que me atrapan
en los que puedo ver tu alegría, tu tristeza y tu alma.
Tú y tus labios suaves, dulces, que me hacen sentir más allá del cuerpo y de la mente...
los latidos de tu corazón
tu sonrisa
tus pensamientos
tu piel
tu fuerza
tu sensibilidad
tus palabras
tus silencios
tus besos
tus interminables formas de entender la vida
tu aroma
tu esencia...

El mismo tipo raro que se volvió mi mejor amigo.
Y quién iba a pensar que una sola persona podía despertar emociones tan intensas.
Tú, cuando me despierto y cuando me duermo. Cuando sueño en el día y en la noche.
Cuando sueño con estar juntos en un mundo más allá de todo...

Te amo.